Ser atractiva, lejos de ayudar a abrirle las puertas, le ha complicado la existencia a la actriz María Fernanda Quiroz, a quien próximamente veremos como la villana de Las Bravo, telenovela que iniciará el 17 de
agosto.
“Es complicado ser guapa. Evidentemente es una bendición, de hecho todas las mujeres somos bellas con nuestros determinados cuerpos y rostros, pero cuando te dedicas a esto sí es difícil, porque los productores muchas veces dicen: ‘Mmm, una cara más’.
“No sé en qué momento pasó esto. Tienen la idea de que las lindas no tenemos talento. Estoy totalmente en desacuerdo con ello, pero tendré el tiempo y paciencia para demostrarles que la belleza y la capacidad en la actuación pueden ir de la mano. Las guapas tenemos talento, por supuesto”, ahondó.
El caso de María Fernanda Quiroz es muy particular, pues los productores ven en ella las cualidades perfectas para interpretar a la villana de la historia.
La actriz atribuye esto a que tiene cara de pocos amigos como ella se califica, pero aseguró a Excélsior que eso está muy lejos de la realidad.
“A los productores les encanta ponerme en estos personajes coquetos y un tanto malévolos. Les gusta la manera cómo los abordo y mi cara de pocos amigos no me daría para otra cosa. La gente dice que la primera impresión que les doy es de ser presumida y hasta payasa y la verdad es que soy a todo dar”, explicó vía telefónica durante un descanso de las grabaciones finales de este melodrama.
La imagen que el público pueda hacerse de ella no le afecta pues, dice, cuenta con una herramienta con la que éste sabe quién es. “Afortunadamente hoy existen las redes sociales y puedo estar más cerca del público. Por Twitter y Facebook saben que soy fresca, alegre, que no tengo nada de maldad. Eso sí, soy extremadamente coqueta y vanidosa. Aunque soy una mujer de carácter fuerte no hago las cosas por maldad. No paso por encima de nadie”, aseveró.
En Las Bravo, que se estrena el domingo 17 y en la que comparte créditos con Edith González, Saúl Lisazo y Mauricio Islas, entre otros, interpretará a Rox, caprichosa y manipuladora.
“Me encanta darle vida a una mujer totalmente mentirosa, maestra del engaño, eso me divierte, amo ser mala en las telenovelas”, confesó.
Para Quiroz, pertenecer a este proyecto, que ya se grabó en su totalidad, le trajo muchas experiencias de vida y, particularmente, aprendió mucho con uno de sus compañeros de elenco.
“Uno de los grandes regalos que me llevo de esta producción fue estar con Saul Lisazo, quien es un tipazo, además de guapo y excelente actor, es un gran compañero, siempre tuvo una actitud agradable, todo el tiempo estuvo de buenas y me dio consejos, además cuenta chistes y eso hizo las jornadas de trabajo más amenas y leves”, aseguró.
Este proyecto es el primero en Azteca que se graba en su totalidad antes de entrar al aire, esto tiene muy inquieta a la actriz, pero confía en que tendrá éxito.
“Es la primera vez que me pasa y, honestamente, me sentí muy nerviosa e impaciente porque estoy acostumbrada a grabar y verme, y no tanto por cuestión de vanidad, porque al final todos lo somos. Más bien tiene que ver con el termómetro, ver cómo reacciona la gente, qué hice bien y qué no salió como esperaba, eso es muy importante para el actor.
“Pero creo que ésta es una nueva modalidad y hay que estar abierta a los cambios, ya veremos qué pasa, aunque es difícil no ver nada. He grabado seis meses y no sé como quedó. Confío plenamente en mi talento y en la dirección y espero que todo salga muy bien”, comentó Quiroz.
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